
La endrina: ¡por qué es tan sana!
Incluso en las estaciones más frías, la naturaleza ofrece una gran variedad de frutas silvestres. Por su color azul intenso, es posible que no se vean en los arbustos, pero su contenido nutricional y su sabor las convierten en un manjar saludable y delicioso. La próxima vez que dé un paseo invernal, no pierda de vista estos frutos parecidos a los arándanos en los arbustos. Para saber más sobre sus beneficios nutricionales, sus efectos y algunas recetas tentadoras, siga leyendo.
Los puntos clave
- En crudo, las endrinas son amargas y ligeramente ácidas.
- La endrina contiene taninos que, debido a su ligero amargor, tienen efectos diuréticos y ligeramente laxantes y pueden influir positivamente en el nivel de azúcar en sangre.
- La vitamina C es el principal agente de las bayas negras.
- La endrina puede consumirse cruda o calentada previamente.
- El grano de endrina no debe comerse, ya que contiene cianuro de hidrógeno.
- La endrina puede convertirse en una excelente mermelada afrutada, té, zumo o licor.
Sabor, nutrientes y efectos de la endrina
Una sustancia llamada antociano es la responsable del color oscuro de la endrina, que tiene propiedades antioxidantes. El sabor amargo de las bayas se debe a los taninos, que tienen un efecto astringente y actúan como vasoconstrictores. Esto da a la lengua una sensación ligeramente áspera y peluda al comerlos. Es una característica que también confiere a la fruta propiedades ligeramente laxantes y diuréticas. Estas bayas se han utilizado durante muchos años en la fitoterapia precisamente con este fin. Existen pruebas científicas de los efectos positivos de los taninos en el nivel de azúcar en sangre ( ). Además, 100 g de endrinas contienen 24 mg de vitamina C, lo que equivale al 21% de las necesidades diarias. Sin embargo, como la vitamina C es sensible al calor, si se calientan las bayas, el contenido de vitamina C disminuye. Si se te ha pasado el plazo para recolectar las bayas, puedes utilizar las flores, que constituyen un té excelente y aromático. Tanto las flores de endrina como las bayas tienen efectos antiinflamatorios.
Además de su inconfundible sabor, las endrinas también aportan beneficios nutricionales y se pueden encontrar en abundancia en la naturaleza, así que ¡mantén los ojos bien abiertos en tu próximo paseo invernal!
Localización y origen de la endrina afrutada
Botánicamente hablando, la endrina es un tipo de ciruela. El fruto es pequeño y esférico, de color azul oscuro a púrpura claro, por lo que también se conoce como espino negro. El endrino crece en arbustos espinosos y se encuentra tanto en Europa como en la zona mediterránea. Cuanto más viejo es el arbusto, más espinas tiene.
El endrino suele encontrarse a lo largo de los senderos de los bosques caducifolios o en los setos y puede encontrarse de octubre a marzo. El endrino prefiere suelos más secos en zonas soleadas. Suelen congregarse con avellanos, así como con rosales silvestres y bayas de enebro. Si desea recoger endrinas, no olvide llevar guantes, ya que los arbustos son espinosos.
Existen diferentes tipos de endrinas, cuyo contenido de azúcar varía. Para obtener bayas de sabor más dulce, espere hasta la primera helada. Las temperaturas negativas hacen que las enzimas presentes en la fruta descompongan los taninos, lo que produce una baya más dulce.
Procesado y almacenamiento de endrinas

Las endrinas pueden convertirse en una excelente mermelada afrutada y tomarse como zumo o té, pero también son un exquisito licor. Aquí aprenderá todo lo que debe tener en cuenta al procesar endrinas:
Una vez recolectados estos pequeños frutos silvestres, hay que pensar en cómo conservarlos para evitar la pérdida de nutrientes. Pero si tienes otros planes, también puedes congelar la endrina en tu congelador vertical Liebherr. La congelación rápida tiene otras ventajas. No tiene por qué esperar a la primera helada para recoger las bayas: puede imitar una helada. Las endrinas crudas sólo son comestibles hasta cierto punto, ya que el hueso de estos frutos de color azul púrpura contiene amigdalina. Esta sustancia se convierte en cianuro de hidrógeno en el organismo, lo que impide el transporte de oxígeno fuera de los glóbulos rojos. Los niños en particular no deben comer endrinas crudas, ya que su organismo elimina el cianuro de hidrógeno con menos eficacia. Siempre que se elimine el grano, las bayas se pueden comer crudas, pero para ello hay que ser un verdadero amante de todo lo amargo. Comido crudo, el endrino es picante y ligeramente ácido debido a los componentes amargos que contiene su pulpa. El amargor disminuye durante el calentamiento. Pero cosecharlas en el momento adecuado también puede hacer que las bayas sean más dulces. Es posible conservar las endrinas en el congelador vertical Liebherr hasta 12 meses, pero al descongelarlas salen blandas y es mejor seguir procesándolas que utilizarlas como decoración o comerlas crudas.
Ingredientes para un litro de zumo de endrinas:
- 750 g de endrinas
- 1 litro de agua
- 750 g de azúcar (moreno)
- 1 cucharada de zumo de limón
- Canela o anís al gusto
- Frascos estériles para almacenamiento
Receta de endrinas tan sabrosa como eficaz
Con la endrina puedes crear un zumo que no encontrarás en ningún supermercado Sólo necesitarás unos pocos utensilios para preparar tu propio zumo de endrinas, pero sí bastante paciencia. La elaboración del zumo requiere hervir las bayas varias veces para conseguir el inconfundible e intenso aroma de esta fruta, así que prevea unos tres o cuatro días para preparar su zumo de endrinas.
Preparación del zumo de endrinas en tres pasos
1. Lavar las endrinas y secarlas brevemente. Colocar la fruta en una olla y verter agua hirviendo sobre ella. Tapar la olla y dejar reposar la mezcla durante 24 horas sin aplicar más calor.
2. Vierte el agua aromática de endrinas en una olla nueva, utilizando un colador para recoger las endrinas. Hierva primero el zumo sin las bayas y, a continuación, añada la fruta en cuanto el zumo esté hirviendo. Dejar reposar la mezcla de zumo de fruta tapada durante 24 horas más. Repita este paso unas cuatro veces.
3. El último día, puedes hervir el zumo con azúcar y zumo de limón. Añadir especias como una pizca de canela o anís al gusto. Introducir el zumo hervido en los tarros previamente limpios.


