
Col de Milán: verdura con buenos valores nutricionales
Por su delicado aroma, la col rizada es versátil y puede combinarse perfectamente con una gran variedad de platos. La col de Milán es originaria de la región mediterránea, pero actualmente se cultiva en todo el mundo y está disponible todo el año. Se ha establecido firmemente, sobre todo en la cocina europea. Siga leyendo para descubrir todo lo que necesita saber sobre la col rizada: qué valiosos nutrientes, vitaminas y minerales y cuántas calorías contiene.
Tiempo de almacenamiento*
| Cajón BioFresh Fruit & Vegetable justo por encima de 0 °C con alta humedad | 20 días |
| Cajón EasyFresh 7 °C con placa de regulación de aire | 10 días |
| Compartimento frigorífico 7 °C | 8 días |
| Congelador -18 °C | 12 meses |
Los puntos clave
- La col rizada es saludable: rica en vitamina C, ácido fólico, hierro, proteínas y fósforo, con sólo 26 kcal por 100 g.
- Versátil: ya sea como guarnición, en rollos, cruda en ensalada o como elemento decorativo, la col rizada combina bien con muchos platos.
- Sabor típico: suavemente picante con una agradable nota ligeramente a nuez.
- Reconocer la frescura: las hojas crujientes y fáciles de romper y la "prueba de la sacudida" ayudan a la selección.
La col de Milán y sus valores nutricionales, vitaminas y calorías
Exteriormente, la col rizada impresiona por sus hojas onduladas de color verde claro a oscuro.
Aunque la col rizada no es tan firme como sus parientes la col blanca o la lombarda, se caracteriza por su textura crujiente. Una característica típica de la col de Milán es su sabor picante pero suave. La col de Milán también destaca por sus valores nutricionales: 100 gramos contienen suficiente vitamina C y ácido fólico para cubrir las necesidades diarias de un adulto, y sólo tienen 26 kilocalorías. En comparación con la lombarda, contiene el doble de proteínas, grasas, hierro y fósforo. Estamos convencidos: la col rizada es saludable.
Nuestro consejo: al igual que otros tipos de col, la col rizada puede tener un efecto hinchazón. Para evitarlo, es aconsejable condimentar la col con anís, hinojo o alcaravea.

Conservación de la col rizada: para un efecto adecuado y una frescura más duradera
También conocida como col de Gales o berza galesa, la col rizada está disponible todo el año. Dado que la col de Milán temprana tiene unsabor especialmente tierno y suave, es ideal en forma de rollos de col o cocinada al vapor como guarnición de verduras servida con platos de carne o pescado. La col de Milán también está deliciosa cruda, por ejemplo en ensalada. Combinado con otros ingredientes frescos, también queda muy bien gracias a su forma rizada. Por eso las hojas exteriores se utilizan a menudo como decoración o como recipiente para contener salsas.
Cuando compre col rizada, asegúrese de que esté fresca para obtener unos valores nutricionales óptimos. Se reconoce por sus hojas fácilmente rompibles. También puede hacer la "prueba de la sacudida": si la col de Milán vibra, es que está fresca. Si no va a utilizar la col inmediatamente después de comprarla, es mejor guardarla en un lugar fresco. En el compartimento frigorífico normal, se mantendrá fresco hasta 8 días. Un frigorífico con tecnología BioFresh de Liebherr es especialmente adecuado para conservar los nutrientes de la col rizada. Este compartimento especial para alimentos frescos proporciona una temperatura constante justo por encima de 0 °C con una humedad del aire óptima. De este modo, los alimentos se mantienen frescos durante mucho más tiempo. En su compartimentoBioFresh para frutas y verduras, la col rizada puede conservarse hasta 20 días.
Para disfrutarla durante más tiempo y conservar su valor nutritivo, la col rizada puede congelarse hasta 12 meses. Basta con escaldarlas brevemente antes y meterlas en el congelador vertical.
*Todas las especificaciones indicadas deben considerarse como valores orientativos y dependen en cada caso del tipo de alimento y del almacenamiento adecuado sin interrupción de la cadena de frío desde la cosecha/producción hasta el electrodoméstico Liebherr. En caso de que los productos alimenticios tengan información sobre la fecha de caducidad mínima, siempre se aplica la fecha que figura en el envase.


