Stephan Schlamminger no solo es un entusiasta empleado de Liebherr

El técnico de servicio también lleva su pasión por la empresa y los productos técnicamente exigentes a su vida privada. La razón de este estrecho vínculo es, sin duda, también la cohesión entre compañeras y compañeros. Para Stephan Schlamminger, se han creado amistades de verdad gracias a ello.

En casa, me gusta contar mis experiencias en Liebherr.

Stephan Schlamminger

«Cuando se contrae la fiebre de Liebherr, no puedes deshacerte de ella tan fácilmente. Y no solo es cosa mía, porque muchos de nosotros llevamos a Liebherr en las venas...» Algunas personas colocan un modelo de grúa Liebherr en el salón, mientras que a otras les gusta ropa con las ocho letras en su vida privada. Por ejemplo, me gusta contarles a mis amigos y familiares cosas interesantes que hayan ocurrido en el trabajo. Ya se trate de proyectos especiales como el soporte de prototipos o los interesantes contactos con las plantas de Liebherr en el extranjero.

Creo que es positivo que mi trabajo siempre me plantee nuevos desafíos. Pero nunca tengo la sensación de enfrentarme a ellos en solitario. Prefiero sentirme parte de un todo. No importa en qué sede esté, siempre conozco rápidamente a compañeros súper agradables con los que estoy en la misma onda. A menudo llegan a hacerse muy buenas amistades».

 Mariana Pichurova

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 Rodolfo Garcia

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