Manipulación de carga pesada en el puerto
La elevación de cargas muy pesadas plantea continuos nuevos desafíos, que los operadores de puertos no tienen más remedio que afrontar. El desarrollo del catálogo de productos de Liebherr se produce al mismo ritmo que el aumento de los tonelajes que es preciso manipular en los puertos del mundo.
Grúa giratoria de instalación fija FCC 320
Aplicación para carga pesada a los pies de las cataratas del Niágara (EE. UU.).
Grúas móviles portuarias LHM 600
Instalación de una pluma de 87 metros para funcionamiento en tándem en Alemania.
Grúa móvil portuaria LHM 420
Componente de una turbina para la instalación de una central eléctrica en Inglaterra.
Grúa móvil portuaria LHM 550
Sala de máquinas de 60 toneladas para un aerogenerador en Alemania.
Grúa móvil portuaria LHM 600
Instalación de una plataforma petrolífera en Ucrania.
Grúas móviles portuarias LHM 400
Botadura de un superyate en Nueva Zelanda.
Grúa móvil portuaria LHM 500
Descarga de un automotor en Alemania.
Grúa móvil portuaria LHM 550
Componentes para aerogeneradores en EE. UU.
Grúas móviles portuarias LHM 600
Elevación pesada de 416 toneladas en Alemania.
Apropiadas tanto para puertos marítimos como fluviales y aptas para todo tipo de mercancías y tamaños de buques, ya sea en uso móvil o con anclaje fijo, las grúas marítimas de Liebherr marcan nuevas referencias en el campo de la manipulación de cargas pesadas. El nivel más avanzado de la tecnología de equipamiento portuario se encuentra actualmente en 616 toneladas. Para ello se necesitan dos grúas móviles portuarias del modelo LHM 800.
Las ventajas de un vistazo
La precisión del movimiento de la grúa resulta decisiva para la manipulación de cargas pesadas. Cuando resulta necesario posicionar con una exactitud milimétrica mercancías que pesan toneladas, el operador debe poder confiar en el movimiento de su máquina. El control electrónico de la propulsión hidrostática garantiza la transmisión directa de las maniobras efectuadas con el joystick y de las órdenes de control al comportamiento de los movimientos de la grúa.
Una grúa Liebherr de tipo Subsea Crane (RL-K 7500) con un peso de 665 toneladas es elevada por dos grúas móviles portuarias (LHM 600) y una grúa sobre camión (LG 1750) desde la columna base en el banco de pruebas hasta el muelle, a fin de prepararla para su embarque.
Las funciones relevantes para la seguridad están distribuidas por toda la grúa. En lo que se refiere a la máquina y el hardware, las medidas adoptadas van desde la instalación de unidades redundantes para los transmisores angulares y los ejes dinamométricos hasta la duplicación de los microprocesadores.
El software de la grúa también se puede equipar con numerosos sistemas de asistencia a la seguridad. Entre estos se cuentan sistemas preventivos capaces de evitar las sobrecargas, la tracción oblicua y la pendulación de la carga. La oferta se completa con los módulos más variados para el análisis de la máquina y de la manipulación de la mercancía.
La previsión de la vida útil de una grúa solo puede ser precisa si se tiene en cuenta la frecuencia y el tipo de utilización. De ahí que, al diseñar una grúa, Liebherr tome siempre como referencia las condiciones más duras que se puedan suponer. Tanto la estructura de la grúa como todos sus componentes cumplen los requisitos necesarios para su clasificación en el nivel de exigencia más severo.
Transporte y montaje de una grúa para cargas pesadas FCC 320 a los pies de las cataratas del Niágara. Esta grúa se utiliza para sacar del río las dos embarcaciones turísticas «Maid of the Mist» para su almacenamiento durante el invierno.
