Digitalización, la solución de problemas

La pregunta crucial sigue siendo: ¿cuál es el beneficio para nuestros clientes? Con nuestros productos y desarrollos digitales, tratamos de centrarnos en este tema. Se supone que la digitalización facilita la vida, que hace posible lo imposible. Y el coronavirus ha impulsado enormemente este aspecto. Hace unos meses, por ejemplo, a nadie se le habría ocurrido realizar una formación sobre grúas de forma completamente digital. Nadie lo había pedido antes ni tampoco había obligación de hacerlo. Pero entonces...

Hasta ahora, cuando se introducía un nuevo tipo de equipo, los técnicos de servicio de nuestras filiales de todo el mundo acudían a nuestra fábrica de Ehingen. Aquí se les formaba y se les dotaba de los conocimientos necesarios, no solo para administrar las grúas de su mercado, sino también para formar a los clientes in situ e instruirles sobre los nuevos equipos. A menudo con el apoyo activo de nuestros técnicos de servicio de Ehingen. En el caso de las grúas grandes y complejas, los clientes de todo el mundo también acudían a nosotros para recibir una formación intensiva en la planta del fabricante, ya que aquí tenemos condiciones óptimas de formación.

Este procedimiento fue probado y puesto en práctica con éxito durante muchos años. Pero entonces llegó el coronavirus. La época de las restricciones. Cruzar fronteras sin restricciones, tal y como hacíamos hasta entonces, ya no era posible. Y de hacerlo, solo era posible con condiciones bastante difíciles, con hasta 20 días de cuarentena. Sin embargo, nuestros clientes seguían necesitando grúas nuevas con personal formado.

Teníamos que actuar, ¡y rápido! La misión estaba clara. Por eso nuestro departamento de formación optó por desarrollar diferentes cursos de formación en línea justo al principio de la pandemia. Gracias a la digitalización, la transmisión teórica de conocimientos estaba asegurada. ¡Comprobado, funciona!

Sin embargo, surgió una pregunta lógica: ¿de qué forma podíamos seguir prestando asistencia a nuestros clientes en el terreno? La solución: ¡realizar formación sobre grúas también en línea! Parece un reto, pero ha funcionado. Por supuesto, tras la idea principal nos surgieron varias preguntas: ¿cómo va a funcionar todo esto? ¿Qué equipo técnico se va a necesitar? ¿Cómo garantizamos una conexión a internet rápida y estable en todo el mundo? ¿Cómo afrontamos las diferencias horarias?

Sin embargo, no había tiempo para largos análisis, preparativos y pruebas, porque se tenían que entregar las grúas al cliente. Así que usamos lo que teníamos: nuestros conocimientos técnicos y equipos ya disponibles. Empezamos con una formación para una LTM 1650-8.1 - en Japón. Para poder estar allí en directo y mantener una visión general del lugar de uso, colocamos varias cámaras en los edificios circundantes. Esto nos permitió visualizar las condiciones locales. De este modo, pudimos responder específicamente a las preguntas y deseos del cliente, reaccionar en consecuencia y seguir sintiendo que estábamos allí en vivo y en directo.

Nuestros colegas japoneses, que se encontraban en el lugar, se equiparon con gafas de vídeo que podían enviar imágenes y sonido a Ehingen. De esta forma, pudimos ver exactamente lo que se veía en el terreno. Y escuchar lo que se escuchaba allí. Este fue el principio de las transmisiones en directo entre nuestro técnico instalador de Japón y nosotros, que seguíamos en Ehingen. La sesión formativa digital sobre la grúa pudo celebrarse en directo a pesar de la distancia de más de 10 000 kilómetros, una diferencia horaria de ocho horas y una tecnología algo desconocida. Y les podemos asegurar que las sesiones formativas de una LTM 1650-8.1 no son para nada fáciles. Sin embargo, todo salió a la perfección.

Gracias al alto nivel de conocimientos de nuestro equipo de servicio japonés, al buen contacto con el cliente y a la comprensión de la compleja situación, todos pudimos resolver rápidamente el problema. El equipo Alemania-Japón ha crecido conjuntamente de forma virtual. Así pues, la primera sesión de formación sobre grúas digital se completó con éxito.

No obstante, este tipo de formación sobre grúas no se convertirá en la norma en el futuro. Siempre hay que tener en cuenta la situación global en cada caso: ¿el terreno es adecuado para ello? ¿La conexión del internet es lo suficientemente buena? ¿Se permite la filmación en el lugar?

Además, la proximidad personal al cliente es y seguirá siendo muy importante para nosotros. La cooperación y la asociación «cara a cara» son importantes y deben continuar, no pueden ser sustituidas por el mundo digital. Sin embargo, la digitalización y el trabajo a distancia podrán servirnos de ayuda en el futuro para mantener la disponibilidad operativa de los equipos para nuestros clientes al máximo nivel incluso en tiempos difíciles. Una experiencia emocionante para nuestro equipo conjunto en Ehingen y Japón junto con nuestros clientes, fieles a nuestro lema: ustedes y nosotros, juntos.

Este artículo fue publicado en la revista UpLoad 01 | 2022.